Sábado, 12 de noviembre de 2022

San Josafat

Lecturas:

3 Jn 5-8. Debemos sostener a los hermanos cooperando así en la propagación de la verdad.

Sal 111. Dichoso quien teme al Señor.

Lc 18,1-8. Dios hará justicia a sus elegidos que le gritan.

La Palabra que el Señor nos regala hoy nos invita a vivir en fe, confiando en la fidelidad de Dios, que es el fundamento de nuestra esperanza.

En nuestra debilidad, fácilmente nos inquietamos y agobiamos. Unas veces por el presente, porque nos desconcierta y nos sobrecoge el misterio del mal, tan presente ante nuestros ojos; otras veces por el futuro, que no controlamos y hace patente nuestra pequeñez.

Por eso, a veces hacemos la misma pregunta que los fariseos hace unos días: ¿Cuándo va a llegar el reino de Dios? Y Jesús nos responde lo mismo que a los Apóstoles, momentos antes de la Ascensión: No os toca a vosotros conocer los tiempos o momentos que el Padre ha establecido con su propia autoridad… Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo que va a venir sobre vosotros y seréis mis testigos…  hasta el confín de la tierra (cf. Hch 1, 8).

En medio de este combate (cf. 1 Tim 6, 12), el Señor nos dice que es necesario orar siempre, sin desfallecer.

El que reza nunca está totalmente solo… Cuando ya nadie me escucha, Dios todavía me escucha. Cuando ya no puedo hablar con ninguno, ni invocar a nadie, siempre puedo hablar con Dios (cf. Spe salvi 34).

Y orar con confianza y perseverancia, con la seguridad de que Dios te escucha, pidiendo confiadamente lo que necesitas, pero especialmente, pidiendo el Espíritu Santo  (cf. Lc 11, 13).

El Espíritu Santo es el que, con sus dones, te regala el poder vivir el hoy como un tiempo de gracia de salvación, te regala poder saborear tu vida concreta, porque te hace vivir enamorado de Jesucristo que hace nueva tu vida y te hace experimentar ahí la salvación.

Y el mismo Espíritu te regala poder confiar, descansar, no temer el futuro, porque sella en tu corazón la certeza de Dios te ama, es fiel y no hay nada ni nadie que pueda separarte del amor de Dios manifestado en Cristo Jesús.

Yo abro brecha delante de vosotros (Cf. Miq 2, 12-13).

¡Ven Espíritu Santo! 🔥 (cf. Lc 11, 13).

Homilias de D. Jorge Miró

Volver a reflexiones a la Palabra de Dios